La siguiente cuestión se corresponde a un problema lógico / matemático real y cotidiano:
"Soy un turista y me gustaría visitar la ciudad sin pasar dos veces por el mismo sitio"
Sin embargo, en el ámbito de las matemáticas también podemos plantear preguntas que no tienen nada que ver con la realidad. Son "preguntas al cuadrado". Por ejemplo:
"Es el infinito numerable?"
Pasa lo mismo con la filosofía? Yo no soy filósofo, por supuesto. Pero imagino que muchos filósofos están estrujándose la cabeza intentando responder a preguntas que nada tienen que ver con la "cotidianidad", sino con la propia filosofía en sí misma.
Es el verdadero filósofo el que plantea esas cuestiones trascendentales o, como yo prefiero llamar, "al cuadrado"?
"Soy un turista y me gustaría visitar la ciudad sin pasar dos veces por el mismo sitio"
Sin embargo, en el ámbito de las matemáticas también podemos plantear preguntas que no tienen nada que ver con la realidad. Son "preguntas al cuadrado". Por ejemplo:
"Es el infinito numerable?"
Pasa lo mismo con la filosofía? Yo no soy filósofo, por supuesto. Pero imagino que muchos filósofos están estrujándose la cabeza intentando responder a preguntas que nada tienen que ver con la "cotidianidad", sino con la propia filosofía en sí misma.
Es el verdadero filósofo el que plantea esas cuestiones trascendentales o, como yo prefiero llamar, "al cuadrado"?